Para recorrer el parque natural barranco del río Dulce en Guadalajara podemos optar por diferentes rutas, pero si vas con niños yo te recomiendo una senda que parte del pueblo de Pelegrina. Por su facilidad, por su paisaje y por su encanto esta propuesta de senderismo os va a encantar a toda la familia.
Recorriendo el parque natural barranco del río Dulce desde Pelegrina
Pelegrina es una pedanía de Sigüenza, uno de los pueblos más bonitos de Guadalajara (a 20 kilómetros). Si vas desde Madrid, te llevará una hora y media (coger la A-2 y después la GU-118). Se trata de un pueblo muy pequeño y con pocos habitantes. De hecho tiene solo dos restaurantes: uno a la entrada donde se puede aparcar bien y donde te recomiendo que dejes el coche porque luego dentro es imposible, y otro más cerca del castillo en el que si reservas puedes dejar el coche.
Antes o después de la ruta te recomiendo que hagas un mini-tour por Pelegrina y visites su iglesia con una portada románica, el centro de interpretación del parque natural del barranco del río Dulce y, por supuesto, las ruinas del castillo con unas vistas increíbles.
Desde el pueblo salen rutas de distintos desniveles y distancia por el parque natural del barranco del río Dulce. Nosotros hicimos una circular de unos cuatro kilómetros que resultó perfecta para todos los miembros de la familia. El punto de partida se sitúa al final del pueblo y comienza con una bajada.
Nuestro recorrido se desarrolló en el margen izquierdo del río (si quieres ver el agua correr por el cauce, visita esta zona en otoño o primavera y evítala en verano porque por tramos te lo puedes encontrar seco). No te pérdida y, aunque es cortita, resulta tan agradable que te tomarás tu tiempo. A la mitad del recorrido te encontrarás un puente. Crúzalo y estarás de nuevo de vuelta cuando ves asomar la tres torres que quedan de la fortaleza.
Por si te sirve de orientación, esta ruta está señalizada con balizas naranjas y es apta para ir con carrito de bebé. Si sois ya unos expertos en recorrer caminos y cuatro kilómetros os saben a poco, te aconsejo que optes por una ruta más larga de casi siete kilómetros que te conduce hasta la cascada de Gollorio con un poquito de subida para hacer piernas.
Por cierto, antes de abandonar el parque natural del barranco del río Dulce y de emprender regreso a casa, debes hacer una parada obligatoria en el mirador de Félix Rodríguez de la Fuente. Justo en este enclave fue donde se grabaron algunas de las escenas míticas de ‘El hombre y la tierra’ en las que aparecían lobos y buitres.