Viajar al pasado es posible… en Inglaterra, cerca de la ciudad de Birmingham. Blists Hills es el nombre de un museo al aire libre que recrea un pueblo del mismo nombre de la edad victoriana, hacia finales del siglo XIX, una época en la que se vivía una transición espectacular gracias a la revolución industrial. De hecho, en la zona se pueden visitar otros museos dedicados a esta temática, no en vano se le llama Valley of Invention. Blists Hills era también el nombre de unas minas que suministraban hierro a varios hornos, ya que aquí hubo una gran actividad siderúrgica.
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Blists Hills, una experiencia inmersiva real
Si vas en familia a Inglaterra o Gales, no te pierdas esta propuesta que os gustará tanto a mayores como pequeños. Lo mejor es ir en coche y pasar el día entero. Los precios van desde las 26,50 libras del adulto a los 15,50 de los niños de 5 a 16 años. A pesar de haber ido en agosto, es un plan poco concurrido y mucho menos por el turista extranjero. ¡Así que es perfecto para practicar inglés y aprender Historia!
Una vez que hemos aparcado en el estacionamiento (es de pago) y comprado la entrada, pasamos las puertas del tiempo para aterrizar hace más de cien años. Allí nos esperan los habitantes de este lugar que nos irán explicando cómo se vivía en su tiempo, totalmente caracterizados y metidos en su papel. Las calles son de arena y podemos cruzarnos con coches de caballos. Aquí no hay paneles informativos ni audioguías, es una experiencia inmersiva real.
Qué encontrarás en este pueblo victoriano
La visita es libre, aunque te puedes unir a alguna visita guiada programada. En cada establecimiento puedes conversar con los comerciantes de la tienda o los trabajadores del oficio en concreto. Muchos de los objetos de algunos de ellos son auténticos.
Lo primero que nos encontramos es el banco (Lloyds Bank, una réplica exacta de la sucursal del cercano pueblo de Broseley, de finales del siglo XIX) y en el que podemos cambiar las libras actuales por las de aquella época para hacer compras.
No dejéis de visitar la botica, la confitería, el pub, el colegio, el fabricante de velas, la fundición, la imprenta… e incluso participar en algunas actividades. Si queréis pasar un rato divertido y tener un recuerdo en papel de esta visita, os recomiendo que vayáis al taller de fotografía. Allí, la encargada os elegirá una vestimenta acorde con la moda de la época victoriana y os harán un retrato en sepia. El resultado es increíble.
Además, también podréis visitar una casa por dentro, con mobiliario auténtico, pues algunas de las viviendas han sido trasladadas a este museo tal cual estaban.
Dónde comer en Blists Hills
Si os ha entrado hambre, hay varios sitios para comer. Por supuesto, un fish and chips y otro restaurante más grande con terraza.
En esta zona del pueblo, hay una enorme llanura de césped en el que han instalado una feria para que los más peques se monten en atracciones vintage y una zona de descanso en la que puede incluso que veáis algún espectáculo. También se puede montar en un tren que llega a la mina.
