‘Senda’, de la editorial Pastel de Luna, es de esos libros para leer, pero también para sentir y para ver. Aquí texto e ilustraciones van de la mano para disfrute de los niños y padres. Un texto que nos permite reflexionar sobre los pequeños placeres que nos regala la vida y que no sabemos apreciar por las prisas y el estrés.
‘Senda’, un libro para leer y para sentir
¿Conoces esa sensación de paz y tranquilidad que experimentas cuando terminas de leer un libro? Eso mismo es lo que sentimos mi hija pequeña (cinco años) y yo cuando conocimos el desenlace de la historia que protagonizan los Mau. Y es que acompañar a este clan gatuno por su travesía nos hará conectar con nuestro concepto de la familia y con esas pequeñas cosas que nos hacen realmente felices y que no encierran un valor económico.
‘Senda’, recomendado para niños a partir de los cuatro años, tiene un poder evocador. A través de la lectura de los pequeños fragmentos que encontramos en sus páginas (versos sin rima, de 5, 7 y 5 sílabas) Beatriz Carilla Egido, su autora, nos traslada a un pequeño rincón de Japón. También destacar los dibujos de Flor Kaneshiro, su ilustradora, que representan al detalle los vestidos tradicionales de este país oriental y algunos elementos típicos decorativos, como los torii, arco que se encuentra a la entrada de algunos lugares sagrados . ¡Ays, qué ganas de conocer este lugar del mundo: su comida, sus costumbres, su gente…!
Creo que este libro me ha llegado especialmente al corazón y me ha tocado mi fibra sensible por el momento tan difícil que estamos viviendo a causa de la COVID 19. ‘Senda’ nos recuerda el valor que tienen en nuestra vida actos tan sencillos como respirar aire puro, algo que ahora resulta casi un lujo, ¿no crees?
Conociendo más sobre los haikus, breves poemas de origen japonés
Una de las cosas que hemos aprendiendo con ‘Senda’ es el concepto de haikus. Se trata de breves poemas de origen japonés, tres versos sin rima, de 5, 7 y 5 sílabas, respectivamente. Este es sin duda la primera característica de género poético originario de Japón, pero no es el único.
Otro rasgo que hace únicos a los haikus es que, aunque no es obligatoria, todos llevan la palabra o expresión kigo, que hace referencia a la época del año en la que se escribe el poema
‘los verderones
del bosque al manantial
libres espíritus’.
El tercer factor que indica que estamos ante un haikus es que la temática de ellos gira alrededor de la naturaleza y las costumbres típicas de los pueblos : animales, flores, paisajes…
‘zona de pastos
unas cuantas ovejas
haciendo caca’
El cuarto requisito y quizás el más difícil para el escritor es tener la capacidad de transmitir una emoción y que lo que él sienta lo experimente también el lector.
‘pasa un ciclista
el polvo que levanta
parece niebla’
Y, por último, un haiku es un texto sencillo que no necesita de otros recursos literarios como la metáforas o el uso de complejo y ostentoso vocabulario. En la sencillez está la brillantez.
‘revuelto el aire
parece despistada
la mariposa’
Con estas pautas, ¿qué tal si después de leer Senda os lanzáis a escribir vuestros propios haikus? Avisamos que no es tarea sencilla, pero nosotros ya hemos empezado y prometemos mostraros pronto nuestras creaciones en Instagram!