¿Quieres aprender a volar? ¿A ti hijo/a le gusta el mundo del circo y se queda embelesado/a con los trapecistas? Vas a alucinar con el siguiente plan con niños que hemos encontrado muy cerquita de Madrid, en Tres Cantos. Se trata de Fly Art Madrid, la primera escuela de trapecio volante en España. ¡Descubre todo lo que disfrutamos y por qué es una actividad al aire libre que recomendamos para todas las familias!

Trapecio volante, uno de los mejores planes al aire libre con niños

Cuando era pequeña e iba al circo, me quedaba embobada viendo a los trapecistas, me alucinaba verles pasar de un trapecio a otro. Esa sensación de libertad… ¡me parecía fascinante!

El trapecio volante lo inventó en 1859 Jules Leotard, naciendo como una variante de circo tradicional que, poco a poco, ha ido saliendo de la gran carpa y dejándose ver en las calles, parques, playas y teatros para convertirse en una disciplina accesible a todos los públicos. 

Y esto lo sé porque a mi hija le pasó lo mismo que a mí la primera vez que fue al circo y decidió hacer un trabajo sobre el trapecio para el colegio, así que desde ese instante el trapecio se volvió para ella una obsesión y ¡hasta pretendía fugarse con el circo para aprender a volar!

Mi hija descubrió el trapecio en ese espectáculo circense del que os habló y más tarde en un viaje que hicimos a Londres, paseando por un parque, vio cómo unas niñas lo practicaban y, como no podía ser de otra manera, retomó de nuevo su idea de volar.

Esta vez pretendía mudarse a Londres para hacerlo… Menos mal que, a pesar de que me volví loca buscando un sitio donde poder practicarlo en España, descubrí a Olivier Manzano y a su proyecto innovador, su escuela de trapecio volante Fly Art Madrid.

Actividades al aire libre cerca de Madrid que merece la pena hacer

Por aquel entonces, mi hija, apenas superaba el metro y pesaba no más de 20 kilos. Cuando se plantó delante del trapecio, con su moño bien alto, su sonrisa, sus nervios y sus ganas locas de volar hizo todo lo que los monitores le dijeron: estiró, calentó, se puso el arnés y subió esos 8 metros de altura por esa escalerita que parecía que la conducía directamente al cielo.

Ingenua de mí, pensé que se echaría atrás, paralizada por el miedo y viendo los campos de ese pueblo de Segovia a sus pies. Sin embargo saltó y voló con una sonrisa enorme en la cara y, por supuesto, quiso repetir una y otra vez.

Años después, midiendo ya más de 1,50 y pesando casi los 40 kilos, María ha querido repetir la experiencia. Pasó al trapecio fijo, uno que tiene para practicar las posturas que hacen en pleno vuelo y probó todas las figuras.

Es increíble, aún recordaba las que hizo años antes, pero también aprendió otras nuevas. Corrigieron algunos matices, la enseñaron a colocarse bien y, como la seguridad es la prioridad de esta escuela, la pusieron un arnés en la cintura que llevaría durante toda la actividad.

Por cierto, en todo momento están controlados y supervisados por profesores con una gran experiencia y hay una red elástica debajo a la que pueden caer sin ningún tipo de riesgo de sufrir un accidente.

Una vez arriba y, eso sí, habiéndose dado bien de magnesio en las manos para agarrarse bien, solo quedaba lanzarse y ¡volar! ¡Y después hacerlo una y otra vez!

La experiencia de subirte a un trapecio

Ahora, en los meses de calor, podemos disfrutar del trapecio volante en Tres Cantos, justo detrás del Polideportivo La Luz, en la Escuela de Circo Diverso. Allí hay una amplia parcela, con sombras y bancos y una zona de parking.

Y si pensáis que en invierno no podríais practicarlo, Fly Art Madrid y Team All Stars unen sus fuerzas para ofrecer el primer trapecio volante cubierto de España, por lo que ni el frío ni la lluvia serán una excusa para practicar esta disciplina.

Los beneficios de practicar trapecio volante son numerosos, además de ser una actividad deportiva que tonifica el cuerpo, libera la mente, supera los miedos, genera adrenalina y ayuda a alcanzar retos que jamás habrías soñado.

¿Sabías que el trapecista mas joven tiene 6 años y el más mayor 88? ¿Qué en Fly Art Madrid llevan gastados ya mas de 54 kilos de magnesio o que se han realizado más de 8450 saltos?

Las clases son de mínimo 5 alumnos y de máximo 10, podéis probar una clase suelta o comprar bonos y además podéis organizar cumpleaños, despedidas, clases para grupos de amigos, comuniones y eventos de empresas.

Ponte tu ropa más cómoda y ¡Prepárate para volar! ¡Porque solo existe un riesgo que correr y es la adicción al trapecio volante!