Visitamos ‘La leyenda del Titanic’, la nueva exposición inmersiva de MAD Madrid Artes Digitales dedicada a uno de los buques más emblemáticos de la historia. ‘La leyenda del Titanic’ pretende ir más allá de las películas o los documentales realizados hasta la fecha, pudiéndose revivir los momentos más impactantes desde su construcción pasando por el viaje hasta el hundimiento en la noche del 14 de abril de 1912.
Tabla de Contenidos
¿Cómo era la época del Titanic?
Nuestra aventura se inicia en el mismo momento en el que mostramos nuestra entrada para acceder al Titanic. Las maletas se amontonan en el muelle, mientras que cientos de pasajeros esperamos para acceder el buque. ¡Comienza la aventura!
Primero comenzamos situándonos en esa época. ¿Cómo vivían en aquellos años? Los ricos eran extremadamente ricos y los pobres extremadamente pobres, tanto que huían de su país, Inglaterra, hacia un mundo que ofrecía mil nuevas oportunidades: el sueño americano en la ciudad de Nueva York.
Pero, ¿cuánto podía costar unos billetes para subirse a este braco? Uno sencillo de primera clase rondaría los 12.000 euros a precio de hoy, pero también había camarotes más lujosos con un pasillo de 15 m2 para hacer ejercicio por el que habría que pagar la friolera de unos 40.000 euros actualmente.
Las clases más pobres formado por los inmigrantes viajaban en segunda y tercera clase en camarotes con 4, 6 y 8 literas, pero con un baño privado, lo cual era un lujo para lo que no estaban acostumbrados. Hoy en día tendría un precio de unos 300-700 euros por persona. Para conseguir este dinero, tenía que ahorrar entre 1 o 2 años y vender todo lo que poseían. Solo así podría embarcarse en un viaje hacia la nueva vida.
El Titanic contaba con salones para damas y salas de fumadores para caballeros, comedores, piscinas, baños turcos, gimnasio y restaurante a la carta… ¡Todo un lujo para esa época!
Después conocemos cómo viajaba esa gente y descubrimos historias que nos dejan los pelos de punta, como que 10 españoles viajaban en el buque.
Emocionante homenaje a los músicos del Titanic
Después de pasar una sala para los más pequeños, llegamos a la sala de realidad virtual donde se rinde un merecido homenaje a los músicos que siguieron tocando durante todo el trágico suceso para ayudar a mantener la calma.
Según un pasajero relató, ninguna acción fue tan valiente como la de los músicos que siguieron tocando esa noche mientras el barco se hundía sigilosamente. Realmente sobrecoge el alma que todos los miembros de la orquesta perecieran en el accidente.
El Titanic solo tardó 1 minuto y 7 segundos en sumergirse en las aguas del Atlántico. Desde el punto técnico todo se hizo correctamente y nada podría haber evitado la catástrofe.
El momento más esperado de la exposición inmersiva ‘La leyenda del Titanic’
Y llegamos a convertirnos, por fin, en pasajeros del Titanic gracias a su sala inmersiva de más de 1000m2.
Si habéis estado en alguna de las otras exposiciones que ha organizado MAD, sabréis que esta experiencia te deja sin palabras porque puedes vivir la experiencia de principio a fin.
Pero si crees que esto es lo máximo que puedes ver en ‘La leyenda del Titanic’, estás equivocado porque gracias a la sala de metaverso de 300m2 podrás pasear por sus salas, las habitaciones, el restaurante, la sala de baile, incluso escucharás sus conversaciones y tendrás ‘la oportunidad’ de asomarte, ver el mar y disfrutar del último atardecer…
Y después, por supuesto, hacerte una de las fotos más deseadas y conocidas en la que te conviertes en Rose y Jack, te asomas a la proa del buque y gritas: ¡Soy el rey del mundoooooooooooo!
