Si hay una cita que llegada la primavera todos los madrileños no nos podemos perder esa es asistir al maravilloso espectáculo que nos regala el parque de la Quinta de los Molinos con sus almendros en flor. Este año, debido a las pocas lluvias (recordemos que no cae ni una gota de agua desde el día de Reyes), todo se ha adelantado, así que empieza a organizar ya una visita en familia a este maravilloso lugar porque no te arrepentirás.
Cómo llegar al parque de la Quinta de los Molinos
Siempre que pensamos en los almendros en flor nos vienen a la mente las imágenes de Japón y su tradicional Hanami, pero por qué irnos tan lejos si lo tenemos a unas paradas de metro de nuestra casa. Para los que no se orientan bien o nunca han estado, el parque de la Quinta de los Molinos se encuentra en la calle Alcalá, 527, aunque tiene otros accesos desde la calle Juan Ignacio Luca de Tena al norte, al este por la Avenida del 25 de septiembre y al oeste con la calle Miami.
Puedes acceder hasta este punto en coche, aunque aparcar por la zona puede ser un poco difícil y quizás te toque dar varias vueltas. También puedes ir en transporte público, siendo la estación de metro de Suanzes la que tiene una salida directa a la puerta principal del parque de la Quinta de los Molinos.
La Quinta de los Molinos, el mejor lugar para ver los almendros en flor
Quizás no tengas este rincón de Madrid en tu radar de parques infantiles, y es que aunque tiene la etiqueta de ‘parque’ no es la idea que todos tenemos en la cabeza de columpios, toboganes y demás atracciones para los pequeños de la casa. Aún así, es un lugar ideal para pasar una mañana o una tarde diferente y, sobre todo, para ver uno de los fenómenos más increíbles de la naturaleza: ver los almendros en flor.
Blancas, rosas, tirando a moradas… Son varias las tonalidades que presentan los almendros… ¡y todas son bellísimas! Te puedo asegurar que hasta los más pequeños se quedarán con la boca abierta cuando vean el juego de colores que se crea en este enclave y se colocaran desde distintos ángulos para observarlo y captar bien los detalles.
Y es que aunque aquí te los muestre en fotos, cuando los tienen frente a frente te impresiona más aún. Consejo: llévate el móvil cargado, con la batería al 100% y vacía todo lo que tengas en la papelera porque uno de tus primeros instintos será tomar cientos de instantáneas.
Puedo asegurarte al 100% que si vas en fin de semana te cruzarás con un montón de gente (amantes de la fotografía, aficionados a la jardinería, parejas de novios inmortalizando su amor y niños y niñas vestidos de comunión…) pero el parque de la Quinta de los Molinos es tan extenso – se calcula que puede haber casi 1.500 almendros en la Quinta de los Molinos – y tiene tanta extensión de terreno que hay sitio para todos.
Dentro del parque, hay senderos perfectamente accesibles si vais con silla de ruedas o con carritos de bebés. También tiene bancos para descansar o sentaros a leer un rato (no hay zona de baños). Dentro de este espacio, además, se encuentra el centro de creación y aprendizaje Espacio abierto con talleres infantiles y una amplia programación cultural. Te aconsejo que eches un vistazo a su agenda y quizás puedes hacer un 2 x 1.
Dicen los expertos que los almendros en flor ahora están en pleno apogeo y que es el mejor momento para ver estos capullos de distintos colores. Pasados aproximadamente 15 días, vuelven a esconderse. Luego no digas que no te lo he avisado… Por cierto, este recinto histórico abre de 06.00 horas de la mañana (ver el amanecer allí puede ser una buena opción) y cierra a las 22.00 horas.