El teatro Alcázar de Madrid, en su sesión matinal, acoge un tributo al mejor mago del mundo. Sí, estamos hablando de Harry Potter y como bien sospecháis es un espectáculo ideal para disfrutar en familia. The Magic Show es su título y el nombre por el que debéis buscarlo para conseguir vuestras entradas ya que hay que verlo para creerlo.
Los hechizos centran toda la atención, pero las pinceladas de humor les siguen a la zaga. Nacho González se atreve a ponerse la capa y las gafas de Potter para ponernos a prueba sobre los conocimientos de esta famosa saga mientras nos deja en la butaca con la boca abierta.
No en vano más de 160 funciones ya se han representado de este show en diferentes teatros del país y por ello a Nacho-Harry se le ve cómodo y disfrutar, tanto, que la varita mágica parece una auténtica prolongación de su cuerpo, como si hubieran sido destinados a estar juntos. ¿A qué nos recuerda esto?
Show de magia para niños con Harry Potter y con Hermione Granger
Y si hay un Harry Potter hay una Hermione Granger que siempre está al lado del protagonista para dar apoyo y sabiduría cuando éste lo necesita. Paula Mata es aquí la afortunada o no, porque le toca colaborar en algún truco que más de una echaríamos a correr.
Aunque los verdaderos protagonistas de este espectáculo de magia somos nosotros, los espectadores, bien sea desde nuestras butacas o, los más afortunados desde el escenario. Ojo, que los papás o mamás no se libran de poder subir a las tablas. No quiero desvelar sorpresas, pero hay guillotina y ésta está reservada para los adultos. ¡Qué tensión!
Y aunque el mago tiraba de bromas continuamente ni un ojo parpadeaba en los asientos. Manos alzadas quien recuerde a Nick Casi Decapitado de los libros. Ahí lo dejo.
La espada Gryffindor también tuvo su momento. Los magos-actores tuvieron su lucha-danza que dio su espectáculo. Y no olvidemos que estamos en un espectáculo de magia, por lo que la espada también acabó interviniendo en un truco.
El mensaje que transmiten los espectáculos de magia para niños
Como leéis, hubo de todo: trucos de cartas, de apariciones y desapariciones, de escapismo, de hacer nieve (esto ahora no hay espectáculo que no lo incluya), levitaciones, el de la mujer cortada… y todo ello aderezado con humor y haciendo partícipe al público. Y todo ello, para transmitir un mensaje en el que en esta familia creemos a pies juntillas: “Todo el mundo tiene magia y la magia no se pierda, solo se comparte”.
Este show de magia para niños garantiza una experiencia asombrosa y llena de emoción. Y es que el mago nos acompaña en un viaje a un mundo de misterio, fascinación y magia. Quizá, por poner un ‘pero’, siendo un buen show, se espera más si se vende como algo de Harry Potter.
Los trucos son sencillos, pero efectistas; y aunque hace algún guiño al mundo de Hogwarts, no es suficiente para los grandes fans que tiene la saga, porque es una franquicia muy, muy exigente con un gran imaginario ante el que cuesta dar la talla.