¡Nos vamos de excursión! ¿Quién se viene? Ponemos rumbo a tierras abulenses porque nos esperan rincones con mucho encanto, misterio y tradición. Estos son los pueblos más bonitos de Ávila que debes visitar al menos una vez en la vida.
Tabla de Contenidos
¿Cuáles son los pueblos más bonitos de Ávila?
De Norte a Sur y de Este a Oeste. Ponemos el cuentakilómetros a cero para dar con los pueblos más bonitos de Ávila, con más historia, con más tradición y con un encanto especial. Y es que la ciudad que escogió Santa Teresa de Jesús para pasar una buena parte de su vida guarda un montón de sorpresas.
Arévalo
Llegamos atraídos por su castillo, que se puede visitar por dentro. Según cuesta la historia hasta aquí fue recluida la madre de Isabel la Católica tras la muerte de su esposo Juan II. Además de entrar en esta fortaleza, nuestra recomendación es que de Arévalo conozcas su plaza y apuntes los siguientes puntos de interés: iglesia de Santo Domingo de Silos, Antigua Cárcel Real o la Iglesia de Santa María Mayor del Castillo. De comer, no puede faltar un cochinillo asado.
Madrigal de las Altas Torres
¿Sabes este rincón abulense está muy unido a Isabel la Católica, como también lo está Arévalo? Este pueblo está entre la frontera de Ávila, Valladolid y Salamanca y se incluye en los sitios que forman parte de la historia y la vida la monarca española. En el caso de Madrigal de las Altas Torres fue el lugar de nacimiento de la reina y su residencia durante los primeros tres años. Los monumentos que no puedes dejar conocer destacan los restos que quedan de sus murallas, el Palacio de Juan II, la iglesia de San Nicolás de Bari y la Bodega de los Frailes. Aquí podrás adquirir un vino blanco que lleva el nombre de Isabel La Católica.
Arenas de San Pedro
Son varios los atractivos turísticos de este pueblo que está limítrofe con la provincia de Toledo. Por un lado, las cuevas del Águila que se encuentran solo a unos kilómetros de este pueblo de Ávila; y por el otro, el Palacio de La Mosquera, el Castillo de Condestable Dávalos o el Santuario de SanPedro de Alcántara. Y en época de verano, no puedes dejar de pasar la oportunidad de bañarte en sus piscinas naturales. Y si eres fan de las rutas de senderismo: la Senda de los Pescadores. ¡Para todos los gustos!
Bonilla de la Sierra
Declarado hace un par de años como uno de los 100 pueblos más bonito de España, te recomiendo que te acerques hasta aquí y puedas comprobarlo por ti mismo. No tiene más de 120 habitantes, un par de bares y puede que por sus calles no te cruces con más de dos o tres personas. ¡Aquí se respira paz! Y este ambiente combinado por sus calles empedradas y su estilo medieval nos encantó. La visita a Bonilla de la Sierra no durará más de dos horas, así que como opción después puedes acercarte a Piedrahita o hacer la ruta de los molinos de Corneja.
Piedrahita
Son tantas cosas que ver y hacer en Piedrahita que pasarás casi un día entero allí. Para empezar y como imprescindibles: el palacio de los Duques de Alba, la Iglesia de Santa María la Mayor, el convento e Iglesia de las Carmelitas Delcalzas y las ruinas del convento de Santo Domingo. Y para los amantes del turismo más activo os cuento que Piedrahíta es un lugar privilegiado para la práctica de deportes como el Ala Delta y Parapente. Por cierto el tapeo en los bares que están en las calles alrededor de la Plaza Mayor está muy bien.
Barco de Ávila
Situada a los pies de la sierra de Gredos, la estampa del puente es de las más conocidas, aunque no la única. Hace un par de meses que renovaron el acceso a su castillo y ya se puede recorrer por sus murallas. ¡No te lo pierdas! Como en otros pueblos, aquí tienes varias iglesias, una cárcel antigua, una plaza mayor… Pero nuestro gran descubrimiento fue el Museo de la Judía, una forma de conocer cómo fue y es la vida de los habitantes de Barco de Ávila y la importancia de este alimento para su economía. De hecho, si te quedas a comer en algunos de sus restaurantes, ¡ya sabes lo que tienes que pedir!
Solosancho
En esta ocasión más que hablarte de un pueblo queremos informarte de lo que puedes encontrar en la inmediaciones de este rincón abulense que aparece en uno de los libros que Juan José Millás y Juan Luis Arsuaga han escrito ‘La vida contada por un sapiens a un neardental’. La provincia de Ávila fue uno de los territorios escogidos por la cultura vetona para instalarse y aún quedan restos de esta civilización. Uno de ellos es el conocido como Castro de Ulaca,
Descubrimos este pueblo un verano porque nos hablaron muy bien de sus piscinas naturales y tenemos que reconocer que nos enamoramos de él porque tiene muchas cosas que ver tanto en el mismo pueblo (necrópolis medieval, la ermita de San Isidro o de la Virgen del Espino, el puente románico o el potro de Henar) con en sus alrededores (la Garganta de Peñalar o la Dehesa de Trampalones).
Burgondo
Y sin alejarnos mucho de Navaluenga (puedes hacer los dos pueblos en un mismo día), no dejes pasar por Burgohondo porque me merece la pena. Tiene varias cosas de interés, como una abadía del S. XII, una ermita que se cree q era una antigua sinagoga con unas pinturas medievales muy interesantes. Y, si vas en primavera -verano, acércate a dar un paseo por el río Alberche. ¡No te arrepentirás!
Cebreros
Muchos son los personajes vinculados al pueblo abulense de Cebreros. El primero de ellos, el ex Presidente del Gobierno Adolfo Suárez que nació en Cebreros. La localidad le ha querido hacer más que un merecido homenaje con la apertura del museo que lleva su nombre y que habla del papel que desarrolló en la Transición. Por otro, el nombre de Camilo José Cela también está muy unido a Cebreros. El escritor de ‘La Colmena’ pasó largas temporadas en este pueblo en el que encontró inspiración para algunos de sus libros más conocidos. A través de ‘La Ruta de Cela’ podrás conocer más sobre su estancia aquí. Y, además, visita sus puentes y sus iglesias.
Gavilanes
El senderismo es la principal actividad que nos ofrece este pueblo abulense ubicado en el Valle del Tiétar y cerca de otros rincones que te recomendamos visitar como Arenas de San Pedro, La Adrada o Mijares. Aquí disfrutar los bosques y las gargantas del pueblo y del entorno. A pesar de contar solo con 600 habitantes, existen varias rurales para alojarse. También tienen bodega de vinos. Bodegas Ausín y si quieres comer uno de los platos típicos como son las patata al calderillo, debes visitar el restaurante El Gavilán.